Sí, amigos. Hoy toca hablar de Ojete Calor. ¿Que por qué? Pues… ¿y por qué no? ¿Acaso hace falta una excusa para hablar de este par de entrañables frikis? Para los que no los conozcan, Ojete Calor son como los Simon & Garfunkel españoles del siglo XXI, tamizados por un breve aroma dadaísta irresistible y rompedor, revolucionario en el panorama musical occidental. Bueno, en realidad son Carlos Areces y Aníbal Gómez haciendo el ganso, pero la frase anterior tiene mucho más gancho, no lo vamos a negar.
Aunque parezca mentira, este par de dos ha conseguido editar un disco lleno de jitazos increíbles que no sabemos aún cómo no lo están petando en las pistas de baile de Londres. Aunque tampoco es tan raro que esta piel de toro haya parido algo tan extraño. La verdad es que si lo pensamos muy, muy fuerte, hemos visto cosas peores-mejores a cascoporro en los últimos años en España. Desde Chikilicuatre pasando al disco de baladas de Jesulín o el 80% de invitados que pasaron por el plató de Crónicas Marcianas. El primer vídeo que os presentamos hoy tiene una profunda letra con un marcado mensaje de protesta social, no sabemos muy bien hacia qué, pero protesta a fin de cuentas. Se llama «Viejoven» y es toda una égloga pastoril dedicada a aquellas personas jóvenes con cara de viejo. Como su propio nombre indica.
Y para cerrar el par no podíamos dejarnos en la chistera el gran éxito mundial de la pareja artística, el híper mega conocido «Te persigue el cyborg (Corre, Sarah Connor)», un claro homenaje a la obra escrita de nuestro premio Nóbel Juan Ramón Jiménez. No te dejes engañar por el título, que si pones la canción al revés en el fondo se escucha recitar el primer capítulo de Platero y Yo.
Fíjate si les irá bien la cosa, que hasta han montado una tiendecilla con merchandising y chorradillas varias. Porque tienen en el fondo un público entregado a la causa, porque ellos se deben a su público, porque España los quiere, porque… Porque no hay nadie como ellos. Ojete Calor.